miércoles, 5 de febrero de 2020

NI CON UN MILLÓN DE OVEJAS




Era una noche silenciosa, Gijón dormía plácidamente y en la serenidad de la noche solo se oía el rugido de un dragón rosa durmiendo con las piernas y brazos en cruz entre el gabacho y yo, incluso de su nariz salia un pequeño globo acuoso lleno de satisfacción que se hinchaba y deshinchaba a cada respiración. Mientras Ami (el bicho negro) y  Lucas ( el boxer bonachón) imitaban la posición del Dragón también en estado REM.

Yo solo miraba el techo con el ceño fruncido y la cabeza hecha una maraña de información. En el interior de la misma un montón de empleados imaginarios (que no recuerdo haber contratado) habían montado una lavandería en algún rincón indefinido de mi cerebro, con varias maquinas centrifugaban información una y otra vez. Metían dentro las facturas a pagar del restaurante , la lista de la comprar que debía hacer al día siguiente, la limpieza de la casa pendiente , mi dieta nueva que quería probar antes de la operación biquini (malditos 5 kg impertinentes) o mi cita con el dentista. Cualquier pequeño detalle a hacer era introducido en los enormes bombos y con ruido infernal centrifugaban una y otra vez la información sin dejarme dormir. 
En el argot de mi diccionario se la llama "Noche bistec" porque no haces más que dar vueltas y vueltas toda la noche, en palabras llanas se le llama "insomnio" y en cualquier idioma se le denomina “ noche de mierda”

finalmente desperté al dragón, con un par de patadas sutiles en la cabeza que hicieron explotar la burbuja de su nariz …
-¿Como que se a terminado el Nutella?¡- decía el dragón despertando de su pesadilla recurrente.
-Dragón no puedo dormir.
-Ah claro y como tu no puedes dormir ¿yo tampoco?
  • A ver Dragón eres mi amigo imaginario si yo no duermo tu tampoco.
  • ...este trabajo no está nada bien pagado...
  • Bueno en realidad no te pago...
  • Lo que yo decia. ¿Bueno que te pasa?
  • Que no puedo dormir, que no hago más que pensar en todo y en nada y doy vueltas y vueltas a las cosas y no consigo dormir.
  • Sí sí ya veo a los de la lavanderia...¡¡ Anda pon un tarro de Nutella en esa lista de compra ya que estás¡¡
  • Así no me ayudas Dragón se trata de que no piense en nada  además tenemos 10 tarros por tu temor a que se acabe, creo que por una semana es más que suficiente.
  • Ah sí creo que sí . Bueno pues en ese caso simplemente cuenta ovejas.
  • Venga ya Dragón eso es un mito. Nadie se duerme contando ovejas
  • ¿Lo has intentado?
  • No, jamás.
  • Pues dale una oportunidad a las ovejas. Va que te ayudo.
  • Vale está bien.
De repente visualicé un prado con un montón de ovejas y una pequeña valla . Y el dragón me explicó que debía ir contando cada oveja que saltaba.
-Esta bien , a ver todas en fila – dije mentalmente- una, dos , tres... Dios mio que tedioso es esto.
-De eso se trata wisheast, ha de ser aburrido para que te canses y te duermas.
-Está bien , cuatro , cinco...
-Mira esta oveja tiene una mancha en forma de corazón que graciosa.
-No era que tenia que ser aburrido.
-Sí claro perdona.
-Seis , siete...mira esta es muy pequeña le voy a poner un par de escalones cerca de la vaya para que pueda saltar.
-Buena idea, mira la ocho es muy atlética ¿Porque no he haces saltar con una pértiga?
-¡¡Genial idea dragón¡¡
-Le ponemos a la nueve una colchoneta elástica?
-¡¡Gran idea , y a la 10 que haga dos piruetas y caiga con los brazos en alto¡¡

Así llegamos a las 5 de la mañana y a 578 ovejas, 2 cabras disfrazadas de ovejas 4 vacas y 3 lobos, todos saltando la valla que cambiaba de tamaño de color, había animales rebeldes que no saltaban sino que giraban por el lateral , algunas ovejas gorditas brincaban cerca de la valla ayudadas por otras ovejas que las empujaban hacia arriba y las dejaban caer, una vaca con tutú haciendo una cabriola (he de decir que perfecta)... en fin que no había conseguido dormir pero había encontrado 587 formas de saltar una valla.

El dragón y yo llegamos a comprender que esa noche no iba a ser un " plácida noche de sueño" así que decidimos que el día iba ser largo, nos pusimos en pie y nos desayunamos medio tarro de Nutella con dos cafés.

 A eso de las 7 el gabacho se despertó para beber agua y nos encontró a los 2 en el sofá acurrucando un tarro de Nutella, roncando como ceporros y soñando de 578 ovejas y algún que otro animal.

- olala¡ voy a poner mas Nutella en la lista de la compra.- dijo el Franchute y de repente escuchó el click de una lavadora en su cabeza que empezaba a centrifugar.

Felices sueños .


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